Turismo por Castelldefels

La playa de Castelldefels

La playa de Castelldefels es una larga lámina de arena fina situada a unos 18 km al sur de la ciudad de Barcelona, ​​entre dos sistemas naturales bien diferenciados: el delta del río Llobregat, con sus humedales y cañaverales, y el macizo calcáreo del Garraf .

Cuenta con una longitud total de 4,8 km, una anchura media de 90 metros y una superficie total de aproximadamente 500.000 m2.

En la playa de Castelldefels se pueden practicar deportes acuáticos, bañarse en las tranquilas aguas del Mediterráneo, tomar el sol y pasear plácidamente.

La playa está equipada con duchas, papeleras, pasarelas de madera de acceso a la arena, áreas de juegos infantilcs, torres y sillas de vigilancia, cabinas sanitarias, etc.

Los bañistas tienen a su disposición los siguientes servicios: acceso de minusválidos hasta el agua, salvamento y socorrismo, limpieza diaria de la arena, megafonía, servicio wi-fi desde la c / 4 hasta la plaza de las Palmeras, barracas de bebidas y helados, servicio de alquiler de hamacas y establecimientos de restauración fijos en el Paseo Marítimo entre las calles 9 y 23.

   Parque del Garraf

El Parque del Garraf se encuentra entre las comarcas del Baix Llobregat, Alt Penedès y el Garraf, en el sector Suroeste de la llamada Cordillera litoral catalana. Sus límites son el valle inferior del Llobregat, el mar Mediterráneo y la depresión del Penedès.

Ocupa una extensión de 12.820 hectáreas. El parque natural está formado por dos grandes unidades bien diferenciadas geológicamente: una, de rocas calcáreas, y dolomías y una pequeña banda de areniscas rojizas, en el extremo oriental del parque.

La piedra caliza es la que compone casi la totalidad del macizo, la cual, en contacto con el agua y el aire, ha proporcionado, por fenómenos kársticos: cuevas, simas, dolinas y lapiaces.

Buena parte de Garraf nos ofrece un paisaje mediterráneo meridional. La vegetación que caracteriza este paisaje es un matorral denso de uno a tres metros de altura donde dominan la coscoja y el lentisco y donde crecen el palmito, el carrizo y otras especies de procedencia africana.

Más al interior, el paisaje está integrado por fragmentos de encinar y pinares de pino blanco la mayoría de los cuales han sido afectados por los incendios forestales y hoy se encuentran en proceso de regeneración.

En los fondos o valles cerrados se encuentra la vegetación típica del encinar, como es la misma encina, el boj, la roja, la madreselva o el durillo.

Las duras condiciones ambientales del macizo de Garraf (gran insolación, falta de agua, escasa vegetación y relieve muy abrupto) no permiten que viva una fauna rica y exuberante. En cambio, este mismo factor es el que da interés a la original fauna que vive, ya que está formada por una serie de especies adaptadas a estas peculiares condiciones. Como pájaros representativos podemos mencionar: el roquero rojo, el roquero solitario, la collalba negra y la collalba rubia, el hortelano, la cogullada oscura y el encontrado. Además, la inhospitalidad de estas montañas ha permitido que aún vivan algunas especies que se encuentran en peligro de extinción como el halcón y el águila perdicera, aparte de otras rapaces. La vertiente litoral del macizo ofrece también una oportunidad a los pájaros marinos que ha sido aprovechada recientemente por el cormorán.

Se puede desplazar desde cualquier punto desde Castelldefels servicio taxi.